lunes, 1 de agosto de 2011

Un domingo estupendo

Y es que lo hemos pasado genial. A pesar de seguir ordenando, sacando cosas viejas y tirando lo que no sirve, mi padre e Ethan han montado la piscina esta mañana. La han puesto en medio del huerto y después de horas llenándola, nos hemos podido dar un chapuzón, Yago incluido. Han disfrutado y nosotros con ellos. Nos hemos reido mucho con Yago, por cómo levantaba los piececillos al notar el agua fría, pero después ha estado chapoteando un poco. Luego han hecho un fuego y hemos comido chuletitas, papas arrugás con mojo y una riquísima ensalada. Acto seguido los enanos a dormir y ¡menuda siesta! 3 horas que han dormido y a la que dormía a Yago, me he quedado yo frita también. Así ahora, la 1 menos cuarto y yo sin sueño. Por la tarde hemos seguido ordenando y vaciando la habitación de los niños para ordenarles todas sus cosas y ya parece que se va viendo luz al final del túnel. Yo creo que mañana queda todo listo o al menos eso espero. Voy a intentar dormir porque Yago no perdona y mañana a las siete y medio ya está en planta ;o)